El problema en el tema del valor del inmueble a los efectos del pago del impuesto de transmisiones patrimoniales lo tenemos, básicamente, en que nosotros demos un valor, pero que a la Administración le parezca poco (si le parece mucho, tampoco te va a picar a la puerta para devolverte lo que hayas pagado de más -a no ser que busque otra cosa...-).